Viajes por el Mundo

HISTORIA DE LAS EXPLORACIONES POLARES

5-05) Crónica de un turista en la Antártida (II)

Capítulo 5: La época moderna de las exploraciones

07: Base argentina almirante Brown – Canal de Lemaire – Refugio Peterman

Después de desayunar, como siempre, embarcamos en las zodiacs, esta vez dando una vuelta larga por la bahía donde está la base argentina Comandante Brown.


Base Comandante Brown

Aquí podemos estirar un poco más las piernas de lo habitual, subiendo a un pequeño montículo encima de la base. La perspectiva paisajista cambia radicalmente.


Estirando las piernas

A la tarde realizamos con el barco el canal de Lemaire.


El paso más estrecho del canal Lemaire

Paso vigilado por los Picos Una (Dos torres bellísimas de pinta inaccesible).



 


Los imponentes Picos Una. Fuente: www.wikipedia.org

El canal tiene un ancho mínimo de 700m y unos 11km de largo, ensanchándose en la parte final. El canal está rodeado de acantilados y montañas que alcanzan 1000m de altura.



 


El barco rompiendo pequeños bloques de hielo

Cerca de allí está el refugio Groussac, en la isla Petermann. 


Refugio en la isla

Lo visitamos, y después de cenar, al atardecer, volvemos otra vez para ver la puesta del sol desde allí. 


Puesta de sol

Enfrente podemos ver el monte Shackleton.


Inmensa mole del Shackleton al fondo

08: Mal tiempo

Hace muy mal tiempo. Ha nevado mucho a la noche y se decide volver hacia el Norte, otra vez por el canal Lemaire. Charla en el salón comunitario sobre la formación de los glaciares. Muy interesante.


El inmenso mundo del hielo y los glaciares

09: Base Primavera

El tiempo está bastante nublado, pero podemos desembarcar en la base argentina Primavera. 


Base Primavera con tiempo nublado

Después de comer, vamos a una isla que está enfrente.


El tiempo va mejorando. Sacando fotos a diestro y siniestro

A última hora de la tarde, las nubes desaparecen y surge la brillante idea de volver a ir a la base Primavera para ver la puesta del sol. Al final queda una puesta maravillosa.


Poniéndose el Sol

10: Isla Decepción

Uno de los días cumbre. Isla Decepción. Nos introducimos  en su  bahía a través del Neptuno pass, dentro de la isla, ya que hace una especie de herradura. Justo al lado hay una antigua estación ballenera. 


Entrando en su bahía a través del Neptuno pass

Hay muchísimos restos. Tenemos la ocasión de subir por una ladera hasta llegar a lo más alto de la isla. 


Restos antiguos de una lancha ballenera

Aprovechamos para hacer un pequeño recorrido. Da gusto estirar las piernas. 


Explorando la isla

El día ha salido redondo y a la hora de la cena, se celebra una barbacoa al aire libre. Empieza a nevar a ahí estamos, en la calle comiendo chuletas, salchichas, ensalada etc. 


Vista general de la isla con restos antiguos de la explotación ballenera

Que no falta también el vodka para calentar las extremidades. 


Caos de metales, depósitos y maderas antiguas

Al final nos animamos un montón y empezamos a cantar canciones rusas hasta altas horas de la noche.


Mapa de la Isla Decepción

11: Isla King George - Base Presidente Eduardo Frei Montalva

Nos trasladamos a la base chilena Presidente Eduardo Frei Montalva. La mayor base antártica chilena. Se ubica en la península Fildes. Está a solo 200m de la base rusa Bellinghausen. 


La base que parece una ciudad de lo grande que es. Fuente: www.wikipedia.org

Cuenta con una pista de aterrizaje de 1300m la cual abastece a cantidad de bases del sector.



 


Restos de camión oruga

Tiene cosas tan sorprendentes como banco, oficina de correos, capilla, supermercado…


Mapa de la Isla Rey Jorge

12: Base Esperanza

A media mañana desembarcamos en la base argentina Esperanza. 


Cementerio de la base

Esta base es el único asentamiento civil permanente que se encuentra en la Antártida, donde habitan familias con sus hijos. Muy curioso.


Base Esperanza. Fuente: www.wikipedia.org

Es la última visita que hacemos y nos da pena, ya que se va acabando el viaje.


Nuestra última vista antártica. Despidiéndonos de tan maravilloso viaje

13: De vuelta

Pues sí, tenemos que volver otra vez a cruzar el paso de Drake, pero esta vez como auténticos marinos curtidos, no nos vemos afectados por el bamboleo del barco y podemos disfrutar de la mar y recordar este viaje inolvidable.